Domingo 31 de enero, Terraza Teatro San Ginés. Evento estratégico superó toda expectativa.
Me permití la licencia de retrasar esta reseña para analizar la contingencia frente a la persecución cultural que hoy azota el país. Ante las pésimas prácticas para reactivar las artes en Chile, dicho evento se vio postergado desde 2019 (18-O, Covid-19) con bajas de locales en su intento por afirmar las premiaciones a la música independiente.
#ESCUCHAR2021
Podría reducir esta nota a lo estrictamente esencial, que fue el evento como tal (que por lo demás pueden revisar aquí), sin embargo, las esposas invisibles de la pandemia están siendo malversadas por el sesgo inescrupuloso y porfía sin fundamentos de la autoridad.
Originalmente este evento se realizó el martes 26 de enero dentro de los márgenes previos al sin sentido toque de queda que, como bien sabemos, nada aporta al freno de la pandemia que ve como se pudre la Economía Nocturna.
La movida se realizó bajo estricta confidencialidad, a tal grado que cualquier rumor expuesto por los eventuales ganadores sería causal de la pérdida del galardón. ¿Por qué?, se preguntarán; fiestas, eventos y músicos callejeros, por citar algunos, están siendo coartados y torturados bajo el escudo del Covid-19.
#ESCUCHAR2021
Dicho esto, realizar movimientos culturales es igual al veto cultural de la Dictadura: persecución, cancelación, encierro, impunidad, montajes, muerte. Como Director, no expondría a mi personal a los vejámenes injustos de los tiempos que corren, pues ¿cómo un mall puede tener un aforo de ocho mil personas y un reducto abierto al aire libre solo menos de un 1 % de dicha cifra? Intereses hay detrás, claramente, y la cultura no es su target.
Aclarado lo anterior, las ocho horas de montaje, grabación y desmontaje corrieron como cualquier otro evento de los que ya conocemos, eso sí, con capacidad reducida al común denominador de estos trabajos: 50 personas de aforo total. O sea, doble labor para cada uno. Eso no lo paga un fondo.
#ESCUCHAR2021
Indiferente que fuese un evento en parte subsidiado por el Estado, la sombra de las policías estuvo latente durante la jornada. Silenciosos al respecto, nuestras pruebas de sonido, circulación e ingreso de personal se hicieron bajo un total secreto, más aún cuando la presión de quienes merecidamente tienen derecho en asistir, como nominados y prensa, tuvo que ser descartada con el dolor de la producción.
Cuatro bandas, dos canciones por número artístico y la atenta mirada del reloj de arena, dejó una estela de gratos momentos, reencuentros con colegas de las industrias Creativas y Culturales, y la felicidad de presenciar proyectos musicales que contra todo siguen creando.
#ESCUCHAR2021
Paralaje -vía satélite desde la IV Región- se coronó como el estandarte musical del norte del país; Violent Passion Surrogate cumplió su deuda con los premios al presentarse en vivo tras dos galardones; Banda UDARA, con ocho músicas en escena, demostraron que el legado de Violeta Parra está presente ahora y siempre, y finalmente Spiral Vortex, que a estas alturas y con cuatro álbumes editados son la punta de lanza de la música nacional exportable, cerraron un hermoso sunset.
En la misma semana de grabación de #ESCUCHAR2021, nos enteramos que un encuentro similar tuvo ribetes de épocas oscuras con los colegas del festival Sativa; obstaculización policial en horarios de libre circulación, embarazadas detenidas en calabozos con orina y el montaje televisivo de los grupos mediáticos, mermó una actividad que perfectamente pudo haber sido la nuestra. Por fortuna, la realidad y las noches en vela para sortear estas dificultades, dictaron lo contrario.
#ESCUCHAR2021
Es hora de cambiar esta situación. Es hora de ir sin temor. Todo por las culturas.
Presentado por Cerveza Escudo, Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio (Convocatoria 2019). Produce Red Exodia. Colaboran CD Baby, Rockaxis, Terraza Teatro San Ginés, Almagesto, Aprende Drones, Güi Diseño y Marketing, Twitsessions, GrooveList y PulgueraStore.
Por Juan Guillermo Carrasco
Fotos: Karla Riveros